El concejal admitió que la iniciativa será modificada y que habrá cambios "mínimos" para adaptarla al Pacto Fiscal. Dijo que también se revisará la quita de exenciones y el intento por generar más presión tributaria sobre la actividad productiva
El presidente de la bancada de concejales de la Agrupación Atlántica, Guillermo Arroyo, negó que el proyecto de la ordenanza fiscal haya sido restituido al Departamento Ejecutivo por “presiones” de la provincia de Buenos Aires y aseguró que si bien ahora esa iniciativa será sometida a algunas modificaciones, los cambios “serán mínimos”.
Arroyo se expresó de esta manera durante la reunión de la comisión de Hacienda desarrollada esta martes, en la cual su presidente, Alejandro Carrancio, informó que tal como lo había indicado ayer LA CAPITAL, el proyecto de la ordenanza fiscal, junto al de la ordenanza impositiva salieron del ámbito del Concejo Deliberante para que el gobierno “ajuste su contenido” a las pautas del Régimen de Responsabilidad Fiscal de la Provincia.
Más allá de que ese fue el argumento utilizado por la gestión del intendente Carlos Arroyo para solicitar la devolución del expediente, lo cierto es que ambas propuestas contenían medidas que habían generado un amplio rechazo, lo que motivó incluso la intervención de funcionarios provinciales.
No obstante Guillermo Arroyo insistió en desmentir este hecho. “Aclaro que el Ejecutivo no va a revisar la ordenanza fiscal por presiones de la Provincia”, sostuvo, subrayando que la Municipalidad “tiene ‘autarquía’ para definir el contenido de su propio presupuesto” más allá de las indicaciones que puedan surgir desde otros ámbitos.
El concejal agregó que ahora que los expedientes regresaron a manos del secretario de Economía, Hernán Mourelle, “habrá modificaciones” para adaptarlos al Régimen de Responsabilidad Fiscal de la Provincia al cual el municipio acaba de adherir.
“Pero esos cambios van a ser mínimos, porque ya estaba prevista la adhesión”, aclaró, para luego hacer alusión a las reuniones que el intendente mantuvo con representantes de cámaras, empresas y comercios que acudieron a su despacho para rechazar las medidas recaudatorias impulsadas por Mourelle.
“Hubo reuniones con distintos sectores y por eso seguramente algunas cosas se van a rever, en la medida de lo posible”, sostuvo.
Entre los principales cuestionamientos que recibió el proyecto, figura la intención de implementar una amplia quita de exenciones que afectaría a cines, salas teatrales, elencos artísticos, profesionales independientes, los martilleros, la edición y comercialización de libros y diarios, a los medios de comunicación y a las empresas radicadas en el Parque Industrial, entre otros sectores.
Sumado a eso, y en un intento de captar más recursos para la Municipalidad, Mourelle también propuso implementar un cambio en las escalas de la tasa de Seguridad e Higiene y pasar a exigirle el cobro de este tributo a la “actividad primaria” y a gravar todas las exportaciones que se realicen desde Partido de General Pueyrredon.
En las sucesivas reuniones que el intendente y su secretario mantuvieron con cámaras y empresas de los rubros afectados, inicialmente ambos defendieron con vehemencia la implementación de estas iniciativas.
Pero con el correr de los días y a medida que el tema empezó a tornarse cada vez más conflictivo comenzó a percibirse un cambio de actitud.
Este domingo LA CAPITAL tuvo acceso a altas fuentes de la Provincia que, inquietas por el nivel de controversia que habían desatado las propuestas recaudatorias del gobierno, revelaron que el Ministerio de Economía hizo llegar “indicaciones expresas” para que el proyecto fuera modificado.
De hecho, este lunes el Ejecutivo le remitió una nota al Concejo Deliberante solicitándole la devolución de los proyectos de la ordenanzas fiscal e impositiva, lo que los jefes de bloques dispusieron por decreto.
Este martes, durante la reunión de la comisión de Hacienda la concejal de Unidad Ciudadana, Virgina Sívori, advirtió que si tal como se espera el Ejecutivo modificará ambos proyectos, esa tarea tendrá impacto en el cálculo de ingresos y de gastos previsto para el actual ejercicio. Po eso consideró necesario devolver también el proyecto del presupuesto para que sea reelaborado.
Asimismo Sívori hizo notar que tal como fue planteado, el proyecto del presupuesto tampoco respeta algunas de las reglas del Régimen de Responsabilidad Fiscal de la Provincia ya que por ejemplo “carece de una pauta de inflación” para estimar los recursos y los gastos.
Su propuesta, si bien fue acompañada por la concejal de Acción Marplatense, Claudia Rodríguez, no prosperó.
No obstante el concejal Carrancio así como la radical Vilma Baragiola señalaron que estarían dispuestos a promover esa medida en los próximos días, en el caso de que sea necesario.